1 Al Músico principal: Salmo de David, siervo del Señor. LA iniquidad del impío me dice al corazón: No hay temor de Dios delante de sus ojos.
2 Lisonjéase, por tanto, en sus propios ojos, Hasta que su iniquidad sea hallada aborrecible.
3 Las palabras de su boca son iniquidad y fraude; No quiso entender para bien hacer.
4 Iniquidad piensa sobre su cama; Está en camino no bueno, El mal no aborrece.