31 Samuel accedió, y acompañó a Saúl para adorar al Señor.
32 Después de eso, dijo Samuel:«Que traigan a Agag, el rey de los amalecitas.»Y Agag se presentó ante Samuel. Iba tan alegre, que le dijo:«¡Qué bueno que ya acabó esta guerra!»
33 Pero Samuel le respondió:«Tu espada mató a muchos israelitas, y sus mujeres se quedaron sin hijos; y así también tu madre se quedará sin su hijo.»Y allí mismo en Gilgal, ante el Señor, Samuel cortó en pedazos a Agag.
34 Después de eso, Samuel regresó a Ramá, y Saúl se fue a su casa en Gabaa.
35 Y Samuel nunca más volvió a ver a Saúl, aunque lloraba por él. Y al Señor le pesó haber puesto a Saúl por rey de Israel.