2 Crónicas 22:6-12 RVC

6 Éste volvió entonces a Jezrel para curarse de las heridas que le habían hecho en Ramot durante el combate contra el rey Jazael de Siria, y como Jorán hijo de Ajab se hallaba enfermo en Jezrel, el rey Ocozías de Judá, hijo de Jorán, fue a visitarlo.

7 Todo esto venía de Dios, para que Ocozías fuera destruido al llegar adonde estaba Jorán, porque en cuanto Ocozías llegó, se unió a Jorán para atacar a Jehú hijo de Nimsi, al cual el Señor había escogido para exterminar a la familia de Ajab.

8 Al dictar Jehú sentencia contra la casa de Ajab, encontró a los jefes de Judá y a los sobrinos de Ocozías, que estaban al servicio de éste, y los mató.

9 Luego buscó a Ocozías, el cual se había escondido en Samaria, y cuando lo hallaron, lo llevaron ante Jehú y lo mataron. Pero le dieron sepultura, porque dijeron: «Era hijo de Josafat, quien de todo corazón buscó al Señor.» Y la casa de Ocozías no tenía el poder suficiente para retener el reino.

10 Al ver Atalía, la madre de Ocozías, que su hijo había sido muerto, se dispuso a exterminar a toda la descendencia real de la casa de Judá.

11 Pero al ver Josabet, la hija del rey, que mataban a los demás hijos del rey, tomó a Joás hijo de Ocozías y lo escondió, y a él y a su nodriza los resguardó en uno de los aposentos. Fue así como Josabet, hija del rey Jorán y mujer del sacerdote Joyadá (pues ella era hermana de Ocozías), escondió a Joás de Atalía, y no lo mataron.

12 Y Joás estuvo seis años en el templo de Dios, escondido con ellos. Mientras tanto, Atalía reinaba en el país.