14 y que los sepultaran en el sepulcro de Cis, el padre de Saúl. Todo fue hecho tal y como el rey lo dispuso, y después de esto Dios se compadeció del país.
15 Los filisteos volvieron a pelear contra Israel, así que David y sus soldados presentaron batalla contra los filisteos, pero él se cansó.
16 Un descendiente de los gigantes, llamado Isbibenob, que portaba una lanza de bronce de más de treinta kilos y llevaba una espada nueva al cinto, trató de matar a David;
17 pero Abisay hijo de Seruyá lo vio y fue en su ayuda, e hirió de muerte al filisteo. Entonces los hombres de David le dijeron: «De ahora en adelante, no volverás a salir con nosotros a la guerra; no vaya a ser que se apague la luz que alumbra a Israel.»
18 Tiempo después hubo en Gob otra guerra contra los filisteos. En esa guerra, Sibecay el husatita mató a Saf, que era descendiente de los gigantes.
19 Y en otra guerra contra los filisteos, que se libró también en Gob, Eljanán hijo de Yaré Oreguín, de Belén, mató a Goliat de Gat, cuya lanza pesaba lo que un rodillo de telar.
20 Después, hubo otra guerra en Gat, donde había un gigante con doce dedos en las manos y doce dedos en los pies. También éste descendía de los gigantes,