1 Tú, Señor, eres mi Dios;yo te exaltaré y alabaré tu nombreporque has hecho maravillas;tus consejos siempre han sidoverdaderos y firmes.
2 Redujiste a escombros la ciudad extraña;dejaste en ruinas la ciudad fortificada,la que era baluarte de los extraños.¡Ya no volverá a ser ciudad,ni nunca más será reedificada!
3 Por eso te honra el pueblo fuerte,y te teme la ciudad de los violentos.
4 Porque eres la fortaleza del pobre,del necesitado y del afligido;eres nuestro refugio contra la tormentay nuestra sombra contra el calor(pues como tormenta nos azotael ímpetu de los violentos;
5 como el calor en lugar seco,como el calor debajo de una nube,es el orgullo de los extranjeros,pero tú haces que se apaguenlos cantos de los robustos).
6 En este monte el Señor de los ejércitos ofrecerá un banquete a todos los pueblos. Se ofrecerán los manjares más suculentos y los vinos más refinados.
7 En este monte rasgará el velo con que se cubren todos los pueblos, el velo que envuelve a todas las naciones.