4 Moab ha quedado deshecha; puede oírse el clamor de sus pequeños.
5 Se oye el llanto de los que suben a Luhit; los enemigos oyen gritar a los que bajan a Joronayin:
6 “¡Huyan, pónganse a salvo! ¡Sean como la retama del desierto!”
7 Tú, Moab, confiaste en tus bienes y en tus tesoros, pero también serás conquistada, y Quemos será llevado en cautiverio, junto con sus sacerdotes y sus príncipes.
8 ¡A todas tus ciudades llegará la destrucción! ¡Ninguna de ellas se librará! También el valle quedará asolado, y destruida la llanura, tal y como lo ha dicho el Señor.
9 »¡Denle alas a Moab, y que se vaya volando! Porque sus ciudades quedarán desiertas y totalmente deshabitadas.
10 ¡Malditos sean los que no cumplan con lo que el Señor les ha ordenado hacer! ¡Malditos sean los que no empapen con sangre su espada!