30 Caleb pidió al pueblo que se callara delante de Moisés, y dijo:«Subamos, pues, y tomemos posesión de esa tierra, porque nosotros podremos más que ellos.»
31 Pero los que habían ido con él dijeron:«No podemos atacar a ese pueblo, porque ellos son más fuertes que nosotros.»
32 Además, entre los hijos de Israel hablaron mal de la tierra que habían explorado, y hasta dijeron:«La tierra que recorrimos para explorarla se traga a sus habitantes. Toda la gente que allí vimos son hombres de gran estatura.
33 Allí vimos también gigantes. Son los hijos de Anac, esa raza de gigantes. Ante ellos, a nosotros nos parecía que éramos como langostas; y a ellos también así les parecíamos.»