10 Hijo mío, si los pecadores quisieran engañarte,no te dejes llevar por ellos.
11 Tal vez te digan: «¡Ven con nosotros!Estemos al acecho para derramar sangre.Acechemos sin motivo a los incautos.
12 Seamos como el sepulcro, como el abismo,y traguémonos viva y entera a la gente.
13 Hallaremos toda clase de riquezasy llenaremos con despojos nuestras casas.
14 Comparte tu destino con nosotros,y compartiremos todos una misma bolsa.»
15 Pero, hijo mío, no vayas por su camino;¡aleja tus pasos de sus veredas!
16 Sus pies corren hacia el mal,¡se apresuran a derramar sangre!