3 Y otra vez testifico a todo hombre que se circuncida, que está obligado a cumplir toda la ley.
4 Ustedes, los que por la ley se justifican, se han desligado de Cristo; han caído de la gracia.
5 Pues nosotros por el Espíritu aguardamos, por fe, la esperanza de la justicia.
6 Porque en Cristo Jesús nada valen la circuncisión ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor.
7 Ustedes corrían bien; ¿quién les impidió el no obedecer a la verdad?
8 Esta persuasión no procede de aquel que los llama.
9 Un poco de levadura fermenta toda la masa.