1 Por eso, temamos a Dios mientras tengamos todavía la promesa de entrar en su reposo, no sea que alguno de ustedes parezca haberse quedado atrás.
2 Porque la buena nueva se nos ha anunciado a nosotros lo mismo que a ellos; pero de nada les sirvió a ellos el oír esta palabra porque, cuando la oyeron, no la acompañaron con fe.
3 Pero los que creímos hemos entrado en el reposo, conforme a lo que él dijo:«Por eso, en mi furor juré:“No entrarán en mi reposo”»,aun cuando sus obras estaban acabadas desde la creación del mundo.
4 En cierto lugar se dice así del séptimo día: «Dios reposó de todas sus obras en el séptimo día.»
5 Y una vez más dice: «No entrarán en mi reposo».