33 ¡Serpientes, generación de víboras! ¿Cómo escaparán de la condenación del infierno?
34 Por eso, yo les enviaré profetas, sabios y escribas. De ellos, ustedes matarán y crucificarán a algunos, y a otros los azotarán en sus sinagogas, y los perseguirán de ciudad en ciudad,
35 para que recaiga sobre ustedes toda la sangre inocente que se ha derramado sobre la tierra, desde la sangre de Abel el justo hasta la sangre de Zacarías hijo de Berequías, a quien ustedes mataron entre el templo y el altar.
36 De cierto les digo que todo esto vendrá sobre esta generación.
37 »¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que son enviados a ti! ¡Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como junta la gallina a sus polluelos debajo de sus alas, y no quisiste!
38 ¡Miren cuán desolada se queda la casa de ustedes!
39 Porque yo les digo que no volverán a verme, hasta que digan: “Bendito el que viene en el nombre del Señor.”»