13 pues a los que no tienen compasión de otros, tampoco se les tendrá compasión cuando sean juzgados, porque la compasión prevalece sobre el juicio.
14 Hermanos míos, ¿de qué sirve decir que se tiene fe, si no se tienen obras? ¿Acaso esa fe puede salvar?
15 Si un hermano o una hermana están desnudos, y no tienen el alimento necesario para cada día,
16 y alguno de ustedes les dice: «Vayan tranquilos; abríguense y coman hasta quedar satisfechos», pero no les da lo necesario para el cuerpo, ¿de qué sirve eso?
17 Lo mismo sucede con la fe: si no tiene obras, está muerta.
18 Pero alguien podría decir: «Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.»
19 Tú crees que Dios es uno, y haces bien. ¡Pues también los demonios lo creen, y tiemblan!