62 Éstos buscaron su registro de genealogías, y no fue hallado; y fueron excluidos del sacerdocio.
63 Y el Tirsata les dijo que no comiesen de las cosas más santas, hasta que hubiese sacerdote con Urim y Tumim.
64 Toda la congregación, unida como un solo hombre, era de cuarenta y dos mil trescientos sesenta,
65 además de sus siervos y siervas, los cuales eran siete mil trescientos treinta y siete: y tenían doscientos cantores y cantoras.
66 Sus caballos eran setecientos treinta y seis; sus mulos, doscientos cuarenta y cinco;
67 sus camellos, cuatrocientos treinta y cinco; asnos, seis mil setecientos veinte.
68 Y algunos de los jefes de los padres, cuando vinieron a la casa de Jehová la cual estaba en Jerusalén, ofrendaron voluntariamente para la casa de Dios, para levantarla en su mismo lugar.