1 El corazón del rey está en la mano de Jehová, como los arroyos de agua, Él lo inclina hacia donde quiere.
2 Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; mas Jehová pesa los corazones.
3 Hacer justicia y juicio es a Jehová más agradable que sacrificio.
4 Altivez de ojos, y orgullo de corazón, y el labrar de los impíos, son pecado.
5 Los pensamientos del diligente ciertamente tienden a la abundancia; mas los del presuroso, de cierto llevan a la pobreza.