1 Finalmente, hermanos, orad por nosotros, para que la palabra del Señor corra y sea glorificada así como entre vosotros;
2 y que seamos librados de hombres malos y perversos; porque no es de todos la fe.
3 Mas fiel es el Señor, que os confirmará y guardará del mal.
4 Y confiamos en el Señor tocante a vosotros, en que hacéis y haréis lo que os hemos mandado.
5 Y el Señor dirija vuestros corazones en el amor de Dios, y en la paciencia de Cristo.
6 Ahora os mandamos, hermanos, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que os apartéis de todo hermano que anduviere desordenadamente, y no conforme a la doctrina que recibió de nosotros:
7 Porque vosotros mismos sabéis cómo debéis seguir nuestro ejemplo; porque no anduvimos desordenadamente entre vosotros,