4 Pero por no serte muy tedioso, te ruego que nos oigas brevemente conforme a tu gentileza.
5 Pues hemos hallado que este hombre es pestilencial, y levantador de sediciones entre todos los judíos por todo el mundo, y cabecilla de la secta de los nazarenos.
6 Quien también intentó profanar el templo; y prendiéndole, le quisimos juzgar conforme a nuestra ley.
7 Pero interviniendo el tribuno Lisias, con gran violencia le quitó de nuestras manos,
8 mandando a sus acusadores que viniesen a ti. Tú mismo, al interrogarle, podrás enterarte de todas estas cosas de que le acusamos.
9 Y asentían también los judíos, diciendo ser así estas cosas.
10 Y habiéndole hecho señal el gobernador para que hablase, Pablo respondió: Porque sé que desde hace muchos años eres juez de esta nación, de buen ánimo haré mi defensa.