20 De cierto, de cierto os digo: El que recibe al que yo enviare, a mí me recibe; y el que a mí recibe, recibe al que me envió.
21 Habiendo dicho esto, Jesús se turbó en espíritu, y testificó diciendo: De cierto, de cierto os digo, que uno de vosotros me va a entregar.
22 Entonces los discípulos se miraban unos a otros, dudando de quién hablaba.
23 Y uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba, estaba recostado en el pecho de Jesús.
24 A éste, pues, hizo señas Simón Pedro, para que le preguntase quién era aquel de quien hablaba.
25 Él entonces, recostado en el pecho de Jesús, le dijo: Señor, ¿quién es?
26 Respondió Jesús: A quien yo diere el pan mojado, aquél es. Y mojando el pan, lo dio a Judas Iscariote, el hijo de Simón.