20 Y respondiendo Él, les dijo: Es uno de los doce, que moja conmigo en el plato.
21 A la verdad el Hijo del Hombre va, según está escrito de Él; mas ¡ay de aquel hombre por quien el Hijo del Hombre es entregado! Bueno le fuera a tal hombre nunca haber nacido.
22 Y comiendo ellos, Jesús tomó pan y bendijo, y lo partió y les dio, diciendo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo.
23 Y tomando la copa, habiendo dado gracias, les dio; y bebieron de ella todos.
24 Y les dijo: Esto es mi sangre del nuevo testamento, que por muchos es derramada.
25 De cierto os digo, que no beberé más del fruto de la vid, hasta aquel día, cuando lo beberé nuevo en el reino de Dios.
26 Y habiendo cantado un himno, salieron al monte de los Olivos.