33 Después, los soldados del ejército enemigo reconstruyeron la ciudad de Jerusalén, y la convirtieron en una fortaleza griega; le pusieron una muralla alta alrededor y torres fuertes.
34-35 Allí guardaron todo lo que se habían robado de Jerusalén, y también las armas y los alimentos; como vigilantes pusieron a gente malvada de otro país, y a algunos israelitas traidores.
36 El ejército enemigofue un peligro para el temploy una amenaza constante para Israel.
37 Le faltó el respeto al templo,pues allí mató a gente inocente.
38 Por miedo al enemigo,los habitantes de Jerusalénhuyeron espantados,y se fueron de la ciudadporque se llenó de extranjeros.
39 El templo quedó en ruinasy en completo abandono.Sus fiestas parecían funeralesy el culto del sábado daba pena.La gran ciudad quedó humillada.
40 Su humillación fue tan grandecomo una vez lo fue su grandeza.¡Su alegría se convirtió en tristeza!