13 abandonaron sus puestos y regresaron a sus países.
14 Sin embargo, algunos de los judíos que habían rechazado la ley y los mandamientos de Dios se quedaron en Bet-sur, pues allí se sentían seguros y protegidos.
15 Alejandro sabía de las hazañas de Jonatán Macabeo y sus hermanos, y de los muchos sufrimientos que habían soportado. Y cuando supo de las promesas que el rey Demetrio le había hecho a Jonatán,
16 dijo a su gente: «Es muy difícil encontrar un hombre tan valiente como Jonatán. ¡Quiero que sea nuestro amigo y aliado!»
17 Entonces le envió a Jonatán la siguiente carta:
18 «Querido amigo, recibe saludos del rey Alejandro.
19 He llegado a saber que eres un hombre valiente y poderoso. Por eso considero que mereces nuestra amistad.