10 Sin embargo, como ya ha pasado mucho tiempo desde la última carta que nos enviaron ustedes, queremos ahora renovar nuestra amistad.
11 »Siempre nos acordamos de ustedes. Por eso, en todas nuestras fiestas religiosas, cuando le presentamos ofrendas a Dios, oramos por ustedes. Consideramos que es lo menos que podemos hacer por los amigos.
12 Además, nos alegra mucho saber de su prosperidad y fama.
13 »Nosotros, en cambio, hemos pasado por muchas dificultades y guerras; hemos sufrido el ataque de los países vecinos.
14 Pero no hemos querido molestar a nadie, ni a ustedes ni a ninguno de nuestros amigos y aliados,
15 ya que hemos contado con la ayuda de Dios. ¡Nuestro Dios nos ha defendido de nuestros enemigos, y los ha derrotado!
16 »A Numenio hijo de Antíoco, y a Antípatro hijo de Jasón, los hemos enviado a Roma como representantes nuestros. Ellos tienen el encargo de firmar el documento del tratado en el que renovamos nuestra amistad con los romanos.