21 Al ver esto, tuvieron mucho miedo. Y cuando vieron que el ejército de Judas estaba en el valle, listo para atacarlos,
22 huyeron y se refugiaron en el país de los filisteos.
23 Judas y sus soldados regresaron y se llevaron todo lo que los soldados enemigos habían dejado en el campamento. Encontraron mucho oro, plata, telas muy finas, y muchas otras cosas.
24 Por todo el camino iban dándole gracias a Dios y cantando el himno: «Dios es bueno, y nunca deja de amarnos».
25 Aquel día Israel consiguió una victoria muy importante.
26 Los soldados enemigos que lograron escapar fueron a contarle a Lisias lo sucedido.
27 Como todo había salido mal, Lisias se enojó muchísimo, pues eso no era lo que el rey quería.