47 Después construyeron un nuevo altar, igual al anterior. Para construirlo, usaron piedras que nadie había labrado, tal como lo ordena la ley de Dios.
48 Repararon el templo por dentro y por fuera, y limpiaron los patios.
49 Hicieron nuevos utensilios para el culto, colocaron en el templo la lámpara de siete brazos, el altar para quemar incienso y la mesa donde se ponían los panes consagrados.
50 Quemaron incienso sobre el altar y encendieron las lámparas para iluminar el templo.
51 Finalmente, pusieron los panes sobre la mesa y colocaron las cortinas. Así se terminó la reconstrucción del templo.
52 El día veinticinco del mes de Quislev, del año ciento cuarenta y ocho del gobierno de los griegos, todos los habitantes de Jerusalén se levantaron muy temprano.
53 Fueron al templo a presentar una ofrenda, como lo manda la ley de Dios. Esta ofrenda la presentaron en el nuevo altar que habían construido.