50 Quemaron incienso sobre el altar y encendieron las lámparas para iluminar el templo.
51 Finalmente, pusieron los panes sobre la mesa y colocaron las cortinas. Así se terminó la reconstrucción del templo.
52 El día veinticinco del mes de Quislev, del año ciento cuarenta y ocho del gobierno de los griegos, todos los habitantes de Jerusalén se levantaron muy temprano.
53 Fueron al templo a presentar una ofrenda, como lo manda la ley de Dios. Esta ofrenda la presentaron en el nuevo altar que habían construido.
54 En esa fecha se recordaba el día en que los enemigos habían presentado ofrendas a sus dioses sobre el altar del templo. Por eso celebraron con gran alegría la consagración del nuevo altar. Entonaron cantos acompañados de instrumentos de cuerdas y platillos.
55 Toda la gente se arrodilló en actitud de adoración a Dios. Así dieron gracias a Dios por haberles permitido celebrar la consagración del altar.
56 La fiesta duró ocho días. Con mucha alegría presentaron todo tipo de ofrendas a Dios.