8 Se apoderó de una de sus ciudades, llamada Jazer, y de los pueblos vecinos. Después regresó a Judea.
9 Los que no creían en Dios y vivían en la región de Galaad se pusieron de acuerdo para matar a los israelitas que vivían allí. Los israelitas tuvieron que escapar, y se escondieron en la fortaleza de Datema.
10 Luego enviaron una carta a Judas y a sus hermanos, en la que decían:«Esos que no obedecen a Dios están listos para matarnos.
11 Ahora, bajo las órdenes de su general Timoteo, se están preparando para atacar el lugar donde estamos escondidos.
12 Ya han muerto muchos de los nuestros. ¡Vengan pronto a ayudarnos!
13 Todos nuestros hermanos de la región de Tobías han sido asesinados. Se llevaron prisioneros a las mujeres y a los niños, y les robaron todo lo que tenían. En ese lugar, ya han muerto más de mil hombres».
14 No habían terminado de leer la carta cuando llegaron otros mensajeros de Galilea, con toda la ropa hecha pedazos. Al llegar, dijeron: