7 Por eso le pedimos a Su Majestad que envíe a una persona de su confianza, para que vea los daños que nos han causado, a nosotros y a las provincias que ahora le pertenecen. Queremos que Su Majestad los castigue a ellos y a todos sus seguidores».
8 Entonces el rey escogió a Báquides, uno de sus amigos más fieles. Báquides era el gobernador de la región que está al oeste del río Éufrates, de modo que era un personaje muy importante dentro del imperio.
9 El rey le ordenó que fuera a vengarse de los israelitas junto con el traidor Alcimo. Además el rey nombró a Alcimo como jefe de los sacerdotes.
10 Báquides y Alcimo fueron a Judea, acompañados de un ejército numeroso. Al llegar, Báquides les envió a Judas Macabeo y a sus hermanos una falsa propuesta de paz.
11 Pero ellos no le creyeron, pues vieron que Báquides había llegado con un ejército muy grande.
12 Sin embargo, un grupo de maestros de la ley fue a hablar con Báquides y Alcimo, para tratar de llegar a un acuerdo.
13 Los más interesados en llegar a un acuerdo de paz eran los que pertenecían al grupo conocido como «los fieles».