13 »Pues bien, nuestro Dios les ha dado ya el rey que ustedes pidieron.
14 Si ustedes y su rey obedecen y sirven sólo a Dios, él los bendecirá y ustedes vivirán en paz.
15 Pero si no lo obedecen, entonces los castigará como lo hizo con sus antepasados.
16 »Prepárense, porque en este momento nuestro Dios va a hacer un milagro delante de nosotros.
17 Como saben, ahora es el tiempo de la cosecha y no el tiempo de lluvias; sin embargo, le voy a pedir a Dios que haga llover y envíe truenos. Así Dios les mostrará que ustedes hicieron muy mal al pedirle un rey».
18 Entonces Samuel le pidió a Dios que enviara lluvia y truenos, y Dios así lo hizo.
19 Al ver los israelitas lo que Dios y Samuel habían hecho, sintieron mucho miedo y le dijeron a Samuel:—Hemos sido muy rebeldes, pues hasta hemos exigido tener un rey. Ruégale a Dios que no nos quite la vida.