16 Elisamá,Eliadá,Elifélet.
17-19 Cuando los filisteos supieron que David ya era rey de todo Israel, se unieron para atacarlo y fueron al valle de Refaim. Pero David se enteró y se fue a uno de sus refugios. Allí consultó a Dios: «Si salgo a pelear contra los filisteos, ¿me ayudarás a vencerlos?»Y Dios le contestó: «Claro que sí. Yo te ayudaré a vencerlos».
20-21 Entonces David salió a Baal-perasim, y allí venció a los filisteos. Los filisteos huyeron y dejaron tirados sus ídolos, así que David y sus hombres los recogieron. A ese lugar David lo llamó Baal-perasim, pues dijo: «Dios es fuerte como la corriente de un río, pues me abrió el camino para vencer a mis enemigos».
22 Pero los filisteos volvieron a atacar a David y ocuparon todo el valle de Refaim.
23 David volvió a consultar a Dios, y Dios le respondió:«No los ataques de frente; rodéalos y atácalos por detrás. Cuando llegues a donde están los árboles de bálsamo,
24 oirás mis pasos en la punta de los árboles. Ésa será la señal para que te lances al ataque. Ahí me verás ir delante de ti, y destruir al ejército filisteo».
25 Así lo hizo David, y ese día venció a los filisteos desde Gueba hasta Guézer.