7 ¡Qué bueno es disfrutar de la luz del sol!
8 Pero aunque vivamos muchos años, y todo ese tiempo lo vivamos felices, no debemos olvidar que nos esperan muchos días de oscuridad, y que del mañana no esperamos nada.
9 Alégrate ahora que eres joven. Déjate llevar por lo que tus ojos ven y por lo que tu corazón desea, pero no olvides que un día Dios te llamará a cuentas por todo lo que hagas.
10 Deja de preocuparte, pero apártate de la maldad. Ten presente que ni los mejores días de tu juventud tienen sentido alguno.