8 Nadie tiene tanto poder como para evitar la muerte y vivir para siempre. De la batalla entre la vida y la muerte nadie se libra, ni siquiera los malvados.
9 Me he dedicado a tratar de entender todo lo que se hace en esta vida, y he visto casos en que unos dominan a otros, pero que al final todos salen perjudicados.
10 También he visto que sepultan con honores a gente malvada, y que a la gente buena ni en su propio pueblo la recuerdan. ¡Y esto tampoco tiene sentido!
11 Cuando el malvado no es castigado de inmediato, la gente piensa que puede seguir haciendo lo malo.
12-13 Tal vez haya gente malvada que peque y vuelva a pecar, y viva muchos años, pero yo sé que no les irá bien ni vivirán mucho tiempo. Pasarán por la vida como una sombra, porque no respetan a Dios. En cambio, a quienes aman y obedecen a Dios les irá mejor.
14 En este mundo pasan cosas que no tienen sentido; a la gente buena le va como si fuera mala, y a la gente mala le va como si fuera buena. ¡Yo digo que esto no tiene sentido!
15 Por eso digo: «¡A pasarla bien!» En esta vida que Dios nos ha dado, lo mejor que podemos hacer es comer, beber y divertirnos. Eso es lo único que nos queda después de mucho trabajar.