10 [10] Ella a su vez le dio este mensaje para Mardoqueo:
11 [11] «Hace ya treinta días que el rey no me llama. Todos los sirvientes del rey y los habitantes de este país saben que nadie puede presentarse ante el rey sin ser llamado, pues eso se castiga con la muerte. Esa persona es perdonada sólo si el rey la señala con su cetro de oro».
12 [12] Cuando Mardoqueo recibió el mensaje de Ester,
13 [13] le mandó esta respuesta:«No te vas a salvar sólo porque estás en el palacio.
14 [14] Si no te atreves a hablar en momentos como éste, la liberación de los judíos vendrá de otra parte, pero tú y toda tu familia morirán. Yo creo que has llegado a ser reina para ayudar a tu pueblo en este momento».
15 [15] Entonces Ester le mandó esta respuesta a Mardoqueo:
16 [16] «Reúne a todos los judíos que se encuentren en Susa, y ayunen por mí, no coman ni beban durante tres días. También mis sirvientas y yo ayunaremos. Después de eso, me presentaré ante el rey, aunque la ley no lo permita. ¡Y si tengo que morir, moriré!»