2 «Ustedes podrán trabajar seis días de la semana, pero el séptimo día será para ustedes muy especial. Ese día ustedes deberán descansar para honrar a Dios. Quien no obedezca este mandamiento será condenado a muerte.
3 No importa dónde vivan, el séptimo día ni siquiera deben encender fuego».
4 Moisés volvió a hablar con los israelitas, y les comunicó el mandamiento de Dios:
5 «Quiero que junten entre ustedes una ofrenda voluntaria para el santuario de nuestro Dios. Traigan oro, plata y bronce;
6 telas de color morado, azul y rojo; tela de lino fino, pelo de cabra,
7 pieles de carnero teñidas de rojo y pieles finas; madera de acacia,
8 aceite para las lámparas, perfumes para el aceite de consagrar y para el incienso perfumado,