10 Sin embargo, desde adentro los ángeles estiraron el brazo, metieron a Lot en la casa y cerraron la puerta.
11 Luego, a todos los que estaban afuera los dejaron ciegos para que no pudieran entrar.
12 Después de eso, los dos ángeles le dijeron a Lot:—Si tienes en la ciudad otros hijos o hijas, yernos o familiares, sácalos de aquí
13 porque vamos a destruir este lugar. Son tantas las quejas que hay contra la gente de esta ciudad, que Dios nos ha enviado a destruirla.
14 Lot salió de la casa para hablar con los novios de sus hijas, y les dijo:—¡Apúrense! ¡Salgan de la ciudad, porque Dios está a punto de destruirla!Sus futuros yernos pensaron que Lot estaba bromeando,
15 pero al amanecer los ángeles insistieron:—¡Lot, date prisa! ¡Llévate de aquí a tu esposa y a tus dos hijas! ¡De lo contrario, serás destruido junto con la ciudad!
16 Y como Lot no se apuraba, los ángeles lo agarraron de la mano, y también a su esposa y a sus hijas, y los sacaron de la ciudad. Los pusieron a salvo porque Dios les tuvo compasión.