29-31 »Este mandamiento no sólo es válido para los israelitas, sino para todo refugiado en el país. El día séptimo del mes de Tébet no deberán comer nada ni harán ningún trabajo. Será un día de descanso completo y de ayuno, pues en ese día yo les perdonaré todos sus pecados.
32 »La ceremonia la realizará el sacerdote que esté autorizado. Se pondrá su traje sacerdotal de lino
33 y purificará el Lugar Santísimo, el santuario y el altar, y también a los sacerdotes y a todo el pueblo.
34 Para obtener el perdón de sus pecados, deberán cumplir este mandamiento una vez al año».Todo se hizo como lo había ordenado Moisés.