28 se le hará saber que ha pecado. Entonces esa persona me presentará una cabra sin defecto.
29 Pondrá sus manos sobre la cabeza de la cabra y la matará junto al altar.
30 El sacerdote mojará su dedo en la sangre de la cabra y la untará en las puntas del altar, y el resto de la sangre lo derramará sobre su base.
31 Luego quemará sobre el altar toda la grasa de la cabra, como se hace con las ofrendas para pedirme salud y bienestar. Así el sacerdote presentará una ofrenda de aroma agradable en favor de esa persona, y yo le perdonaré su pecado.
32 »Si el que pecó me ofrece una corderita, ésta no deberá tener ningún defecto.
33 Esa persona pondrá sus manos sobre la cabeza de la corderita y la matará junto al altar.
34 El sacerdote mojará su dedo en la sangre y la untará en las puntas del altar, y el resto de la sangre lo derramará sobre su base.