18 »Pide consejos a la gente que sabe elegir lo bueno, y nunca desprecies un buen consejo.
19 »Da gracias a Dios siempre, y pídele que te vaya bien en todo lo que hagas. Nadie es dueño de la sabiduría. Es Dios quien nos da toda clase de bienes, pero también humilla a quien él quiere humillar, y lo hace caer hasta lo más bajo.»Hijo mío, apréndete bien estos consejos y nunca te olvides de ellos.
20 También quiero que sepas que dejé guardados trescientos treinta kilos de plata en la casa de Gabael hijo de Gabrí, en la ciudad de Ragues del país de Media.
21 Por eso no te preocupes de que ahora seamos pobres; si respetas a Dios, haces lo que a él le agrada y te alejas del pecado, serás muy rico».