4 Al salir de la habitación, Ragüel y Edna cerraron la puerta. Entonces Tobías se levantó de la cama y le dijo a Sara:«Levántate, querida, vamos a pedirle a Dios que tenga compasión de nosotros y nos proteja».
5 Ella se levantó, y comenzaron a orar, pidiendo a Dios que los protegiera. Ésta es la oración que hicieron:«Alabado seas por siempre,Dios de nuestros antepasados.Que el cielo y la tierra,y todo lo que has creado,por siempre te alaben.
6 »Tú creaste al hombre,y le diste a la mujercomo esposa y compañera,y de ellos naciótoda la raza humana.»Tú dijiste:“No está bienque el hombre esté solo.Voy a hacerle alguienque lo acompañe y lo ayude”.
7 »No me he casado con Sarapara satisfacer mis deseos sexuales,sino para amarla como esposa.¡Ten compasión de nosotros,y permítenos vivir juntoshasta que seamos viejos!»
8 Los dos dijeron: «¡Amén, amén!»
9 Luego se acostaron, y durmieron juntos esa noche.
10 Antes de que amaneciera, Ragüel se levantó y ordenó a sus sirvientes que cavaran una tumba. Pensó que, si Tobías había muerto, lo mejor sería enterrarlo. Y es que tenía miedo de que la gente se enterara de lo sucedido, y comenzara a insultarlo y a burlarse de él.