20 Timoteo es el único que se preocupa por ustedes, y que los quiere tanto como yo.
21 Los demás sólo se ocupan de sus propias cosas y no de lo que le agrada a Jesucristo.
22 Pero ustedes ya conocen la buena conducta de Timoteo, y saben que él me ha ayudado como si fuera mi hijo. Juntos hemos anunciado la buena noticia.
23 Espero enviarlo a ustedes, tan pronto sepa yo si quedaré o no en libertad,
24 aunque confío que pronto Dios también me dejará ir a verlos.
25 Hace algún tiempo, ustedes enviaron al hermano Epafrodito para que me ayudara en lo que me hiciera falta. Él ha trabajado y luchado conmigo para defender el mensaje de la buena noticia. Ahora me parece conveniente que él vuelva a ustedes,
26 pues tiene muchos deseos de verlos de nuevo. Está preocupado porque ustedes se enteraron de su enfermedad.