28 Aunque no tenían nada de qué acusarlo, le pidieron a Pilato que lo matara.
29 Luego, cuando hicieron todo lo que los profetas habían anunciado, bajaron de la cruz el cuerpo de Jesús y lo pusieron en una tumba.
30 Pero Dios hizo que Jesús resucitara,
31 y durante muchos días Jesús se apareció a todos los discípulos. Éstos habían viajado con él desde la región de Galilea hasta la ciudad de Jerusalén. Ahora ellos les cuentan a todos quién es Jesús.
32 »Dios prometió a nuestros antepasados que enviaría a un salvador, y nosotros les estamos dando esa buena noticia:
33 Dios ha cumplido su promesa, pues resucitó a Jesús. Todo sucedió como dice en el segundo salmo:“Tú eres mi Hijo;desde hoy soy tu padre.”
34 »Dios ya había anunciado en la Biblia que Jesús resucitaría, y que no dejaría que el cuerpo de Jesús se descompusiera en la tumba. Así lo había anunciado cuando le dijo:“Te haré las mismas promesasque hice a David;promesas especiales,¡promesas que se cumplirán!”