45 El santuario pasó de padres a hijos, hasta el tiempo en que Josué llegó a ser el nuevo jefe de Israel. Entonces los israelitas llevaron consigo el santuario para ocupar el territorio que Dios estaba quitándoles a otros pueblos. Y el santuario estuvo allí hasta el tiempo del rey David.
46 »Como Dios quería mucho a David, éste le pidió permiso para construirle un templo donde el pueblo de Israel pudiera adorarlo.
47 Sin embargo, fue su hijo Salomón quien se lo construyó.
48 »Pero como el Dios todopoderoso no vive en lugares hechos por seres humanos, dijo por medio de un profeta:
49 “El cielo es mi trono;sobre la tierra apoyo mis pies.Nadie puede hacerme una casadonde pueda descansar.
50 Yo hice todo lo que existe.”»
51 Antes de terminar su discurso, Esteban les dijo a los de la Junta Suprema:—¡Ustedes son muy tercos! ¡No entienden el mensaje de Dios! Son igual que sus antepasados. Siempre han desobedecido al Espíritu Santo.