7 De pronto bajó una nube y se detuvo sobre ellos. Desde la nube se oyó una voz que decía: «Éste es mi Hijo, yo lo amo mucho. Ustedes deben obedecerlo.»
8 Enseguida, miraron a su alrededor y ya no había nadie con ellos. Sólo estaba Jesús.
9 Mientras bajaban del cerro, Jesús les ordenó que no le contaran a nadie lo que habían visto hasta que él, el Hijo del hombre, resucitara.
10 Pedro, Santiago y Juan guardaron el secreto, pero se preguntaban qué significaba aquello de resucitar.
11 Entonces le preguntaron:—¿Por qué dicen los maestros de la Ley que el profeta Elías va a venir antes que el Mesías?
12 Jesús les respondió:—Eso es verdad. Elías viene primero a preparar todas las cosas. Aunque también es cierto que la Biblia dice que el Hijo del hombre debe sufrir mucho y ser despreciado.
13 Pero yo les aseguro que Elías ya vino, y muchos lo trataron muy mal. Así se anunciaba ya en la Biblia.