16 Todavía estaba hablando el profeta, cuando el rey lo interrumpió diciendo:—¡No necesito de tus consejos! ¡Cállate o te mueres!Por último, el profeta le dijo:—A pesar de lo que has hecho, no quieres escucharme. No hay duda de que Dios te ha abandonado, y de que va a destruirte.