5 Jonadab le aconsejó:—Pues métete en la cama, y haz como si estuvieras muy enfermo. Y cuando tu padre venga a verte, pídele que mande a tu hermana Tamar. Dile que necesitas a alguien que te prepare la comida y te la dé en la boca.
6 Amnón fue entonces a acostarse, fingiéndose muy enfermo. Cuando el rey llegó a visitarlo, Amnón le dijo:—Por favor, deja que mi hermana Tamar venga a prepararme unos panes y me dé a comer en la boca.
7 David mandó llamar a Tamar y le dijo: «Ve a la casa de tu hermano Amnón y hazle de comer».
8 Tamar fue a la casa de Amnón, y lo encontró acostado. Entonces tomó harina, preparó la masa, hizo panes y los puso a hornear. Mientras tanto, Amnón no le quitaba la vista de encima.
9 Cuando el pan estuvo listo, Tamar lo puso sobre la mesa. Pero Amnón no quiso levantarse a comer, sino que le dijo a Tamar: «Ordena a los sirvientes que salgan de aquí».En cuanto los sirvientes salieron,
10 Amnón le dijo a Tamar:—Tráeme el pan a la cama, y dame de comer en la boca.Tamar tomó el pan y se lo llevó a su hermano hasta la cama.
11 Pero cuando ya estuvo cerca, Amnón la agarró por la fuerza y le dijo:—Ven, hermanita, acuéstate conmigo.