8 Además, ustedes deberán ayudarlos en los trabajos, y pagar puntualmente todos los gastos que tengan. Esto se hará con los impuestos que esa provincia paga al tesoro del reino.
9 Asegúrense de que todos los días se les entregue lo que necesiten para las ofrendas que se presenten al Dios del cielo: toros, carneros o corderos, o bien trigo, sal, vino o aceite.
10 Quiero que las ofrendas que se presenten sean agradables al Dios del cielo y que rueguen por mi vida y la de mis hijos.
11 »Cualquiera que desobedezca esta orden morirá de la siguiente manera: Se le atravesará el cuerpo con la punta afilada de una viga sacada de su propia casa, y la casa deberá ser totalmente destruida.
12 ¡Y que Dios destruya a cualquier rey o nación que se atreva a desobedecer esta orden, o intente destruir su templo!»Esta orden deberá cumplirse al pie de la letra.»Darío, rey de Persia
13 Entonces Tatenai, Setar-boznai y los demás jefes cumplieron cuidadosamente lo que había ordenado el rey Darío.
14 Animados por los profetas Hageo y Zacarías, los jefes judíos siguieron con la reconstrucción. Terminaron el edificio de acuerdo con lo que el Dios de Israel había indicado y según las órdenes de Ciro, Darío y Artajerjes, reyes de Persia.