1 Josué envió a dos hombres para que exploraran el territorio de Canaán, y de manera especial a la ciudad de Jericó. Los dos hombres salieron de Sitim, y cuando llegaron a Jericó fueron a la casa de una prostituta llamada Rahab. Allí pasaron la noche.
2 Al saber el rey de Jericó que unos israelitas habían llegado esa noche para explorar el país,
3 mandó a decirle a Rahab:—En tu casa hay dos espías. ¡Mándamelos para acá!
4 Pero como ella los había escondido, respondió:—Sí, es verdad. Vinieron unos hombres, pero yo no supe de dónde eran.