2 Al llegar allí, Jesús dijo a dos de sus discípulos:«Vayan a ese pueblo que se ve desde aquí. Tan pronto como entren, van a encontrar una burra atada, junto con un burrito. Desátenlos y tráiganmelos.
3 Si alguien les dice algo, ustedes responderán: “El Señor los necesita; enseguida se los devolverá.”»
4 Esto sucedió para que se cumpliera lo que Dios había anunciado por medio del profeta:
5 «Díganle a la gente de Jerusalén:¡Miren, ahí viene su rey!Él es humilde,viene montado en un burro,en un burrito.»
6 Los dos discípulos fueron al pueblo e hicieron lo que Jesús les había ordenado.
7 Llevaron la burra y el burrito, y pusieron sus mantos sobre ellos. Jesús se montó y fue hacia Jerusalén.
8 Muchas personas empezaron a extender sus mantos en el camino por donde iba a pasar Jesús. Otros cortaron ramas de árboles y también las pusieron como alfombra en el suelo.