1 “Vosotros sois los hijos del Señor vuestro Dios. No os hagáis heridas en el cuerpo ni os rapéis por delante la cabeza cuando alguien muera,
2 porque vosotros sois un pueblo consagrado al Señor vuestro Dios. Él os ha elegido entre todos los pueblos de la tierra para que seáis el pueblo de su propiedad.
3 “No comáis nada impuro.
4 “Esta es la lista de los animales que podéis comer: toros, corderos, cabritos,
5 ciervos, gacelas, gamos, cabras monteses y toda clase de antílopes.
6 Podéis, pues, comer de todo animal rumiante que tenga las pezuñas partidas, separadas en dos uñas,
7 pero no comeréis de los siguientes animales, aunque sean rumiantes o tengan pezuñas partidas:“El camello, la liebre y el tejón; debéis considerarlos animales impuros, porque son rumiantes pero no tienen pezuñas partidas.