20 y les dirán: ‘Nuestro hijo es desobediente y rebelde; no nos obedece en nada, es un pervertido y un borracho.’
21 Entonces todos los hombres de la ciudad lo matarán a pedradas. Así acabaréis con la maldad que haya en medio de vuestro pueblo y, al saberlo, los israelitas sentirán temor.
22 “Si un hombre es condenado a morir colgado de un árbol por haber cometido un grave delito,
23 su cuerpo no deberá dejarse allí toda la noche, sino que tendrá que ser enterrado el mismo día, porque es maldito de Dios el que muere colgado de un árbol, y vosotros no debéis convertir en impura la tierra que el Señor vuestro Dios os va a dar en propiedad.