20 Todo el terreno así reservado, formado por la porción consagrada al Señor más lo que pertenece a la ciudad, formará un cuadrado de doce kilómetros y medio de lado.
21-22 “Al gobernante le tocará el resto de la franja de territorio que queda entre los territorios de Judá y de Benjamín; es decir, los terrenos situados a uno y otro lado de la porción reservada al Señor y del terreno de la ciudad. Medirá doce kilómetros y medio de ancho, y se extenderá por oriente hasta la frontera oriental y por occidente hasta el mar. En el centro quedará la porción reservada al Señor, con el templo, más la porción de los levitas y el terreno de la ciudad.
23-27 “El territorio de las otras tribus sigue hacia el sur. Cada tribu recibirá una porción de territorio desde la frontera oriental hasta la occidental, en este orden:BenjamínSimeónIsacarZabulónGad
28 “Al sur del territorio de Gad, la frontera irá desde Tamar, pasando por el oasis de Meribá-cadés y el arroyo de Egipto, hasta el mar Mediterráneo.
29 “Este es el país que recibirán como herencia las tribus de Israel, y de esa manera deberéis repartirlo. Yo, el Señor, lo ordeno.
30-34 “La ciudad estará rodeada de una muralla que medirá dos mil doscientos cincuenta metros por cada uno de sus cuatro lados. En cada lado de la muralla habrá tres puertas, cada una dedicada a una de las tribus de Israel, en este orden: las puertas del norte, a Rubén, Judá y Leví; las del este, a José, Benjamín y Dan; las del sur, a Simeón, Isacar y Zabulón; las del oeste, a Gad, Aser y Neftalí.
35 La muralla medirá en total nueve mil metros de largo, y el nombre de la ciudad será en adelante: ‘El Señor está aquí’.”