1 Por aquel mismo tiempo fueron unos a ver a Jesús, y le contaron lo que Pilato había hecho: sus soldados mataron a unos galileos cuando estaban ofreciendo sacrificios, y la sangre de esos galileos se mezcló con la sangre de los animales que sacrificaban.
2 Jesús les dijo: “¿Pensáis que aquellos galileos murieron así por ser más pecadores que los demás galileos?
3 Os digo que no, y que si vosotros no os volvéis a Dios, también moriréis.
4 ¿O creéis que aquellos dieciocho que murieron cuando la torre de Siloé les cayó encima, eran más culpables que los demás que vivían en Jerusalén?
5 Os digo que no, y que si vosotros no os volvéis a Dios, también moriréis.”